Factores que llevan a consumir drogas
Existen muchas causas y muchos factores. Lo primero que hay que tener en cuenta es que el fenómeno de la drogadicción no es exclusivo de un grupo o estrato social, económico o cultural determinado. El consumo de drogas afecta a toda la sociedad en su conjunto.
En general, el uso de drogas corresponde a un afán de huir de la realidad. Las drogas proporcionan una vía de escape, un alivio temporal a los problemas personales, familiares o sociales. También son una puerta de salida frente al vacío existencial presente en el interior de la persona, el cual la lleva a volcarse en búsqueda de salidas ilusorias que llenen dicho vacío.
Algunos factores que favorecen el fenómeno de la drogadicción pueden ser clasificados del modo siguiente:
- Factores de tipo social: En la actualidad, existe una amplia disponibilidad de drogas, legales e ilegales, lo que hace mucho más fácil el acceso y el consumo de las mismas. Tranquilizantes, somníferos, hipnóticos, etc., se pueden conseguir en las farmacias sin receta médica. Asimismo el amplio tráfico y distribución de drogas ilegales hace que sea fácil obtenerlas. Algunas drogas, como el éxtasis, están "de moda", y prácticamente se puede obtener en cualquier discoteca. Niños y jóvenes que viven en las calles pueden obtener pegamentos, tales como el Terokal, para inhalar.
También existe mucha desinformación en el tema de las drogas. Algunos sectores proponen la despenalización e incluso la legalización del uso de drogas tales como la marihuana y la cocaína, argumentando que no son peligrosas, al menos no más que el tabaco o el alcohol, que son legales; o que al legalizar la droga el tráfico ilícito y las mafias cesarán de existir. Los medios de comunicación y sistemas educativos favorecen también el consumo de drogas al promover valores distorsionados (el placer y la satisfacción como meta última de la vida, el consumismo, el sentirse bien a cualquier precio, el vivir el momento, etc.)
El ansia del joven de pertenecer a un grupo, de sentirse parte de un círculo social determinado, y las presiones por parte de los "amigos", pueden hacer también que el joven se vea iniciado en el consumo de drogas. El consumo puede ser el requisito para la pertenencia a dicho grupo, y una vez dentro se facilita la adquisición y el consumo de sustancias tóxicas.
- Factores de tipo familiar: Los hijos de padres fumadores, bebedores o toxicodependientes son más proclives a tomar drogas que los hijos de padres que no lo son. Un ambiente familiar demasiado permisivo, donde no exista disciplina o control sobre los hijos; o demasiado rígido, donde los hijos se encuentren sometidos a un régimen demasiado autoritario o se encuentren sobreprotegidos, puede también fomentar el consumo de drogas. La desatención de los hijos por parte de los padres, las familias divididas o destruidas, las continuas peleas de los cónyuges frente a los hijos, la falta de comunicación entre hijos y padres, todos éstos son factores que contribuyen a crear un clima de riesgo, donde la droga puede convertirse fácilmente en una válvula de escape.
Se ha comprobado que el uso de drogas por parte de los jóvenes es menos frecuente cuando las relaciones familiares son satisfactorias.
- Factores de tipo individual: Muchos factores personales pueden influir en la decisión de consumir drogas. Éstas pueden ser vistas como una vía de escape a los problemas cotidianos; algunas personas las usan como medio para compensar frustración, soledad, baja autoestima o problemas afectivos. En efecto, bajo el efecto de las drogas la persona experimenta un estado de euforia que le hace olvidar los problemas o las limitaciones que tenga. Lo malo es que es una ilusión, y luego de ese estado de euforia viene una frustración incluso mayor que la inicial, lo que lleva a la persona a recurrir nuevamente a la droga.
Otros se inician en la droga por curiosidad, o para experimentar sensaciones nuevas ante una cierta apatía, hastío, aburrimiento o incluso sinsentido de la vida. Ante el vacío que experimentan, la droga se presenta como una posibilidad, aparentemente atractiva, de llenar ese vacío.
En general, el uso de drogas corresponde a un afán de huir de la realidad. Las drogas proporcionan una vía de escape, un alivio temporal a los problemas personales, familiares o sociales. También son una puerta de salida frente al vacío existencial presente en el interior de la persona, el cual la lleva a volcarse en búsqueda de salidas ilusorias que llenen dicho vacío.
Algunos factores que favorecen el fenómeno de la drogadicción pueden ser clasificados del modo siguiente:
- Factores de tipo social: En la actualidad, existe una amplia disponibilidad de drogas, legales e ilegales, lo que hace mucho más fácil el acceso y el consumo de las mismas. Tranquilizantes, somníferos, hipnóticos, etc., se pueden conseguir en las farmacias sin receta médica. Asimismo el amplio tráfico y distribución de drogas ilegales hace que sea fácil obtenerlas. Algunas drogas, como el éxtasis, están "de moda", y prácticamente se puede obtener en cualquier discoteca. Niños y jóvenes que viven en las calles pueden obtener pegamentos, tales como el Terokal, para inhalar.
También existe mucha desinformación en el tema de las drogas. Algunos sectores proponen la despenalización e incluso la legalización del uso de drogas tales como la marihuana y la cocaína, argumentando que no son peligrosas, al menos no más que el tabaco o el alcohol, que son legales; o que al legalizar la droga el tráfico ilícito y las mafias cesarán de existir. Los medios de comunicación y sistemas educativos favorecen también el consumo de drogas al promover valores distorsionados (el placer y la satisfacción como meta última de la vida, el consumismo, el sentirse bien a cualquier precio, el vivir el momento, etc.)
El ansia del joven de pertenecer a un grupo, de sentirse parte de un círculo social determinado, y las presiones por parte de los "amigos", pueden hacer también que el joven se vea iniciado en el consumo de drogas. El consumo puede ser el requisito para la pertenencia a dicho grupo, y una vez dentro se facilita la adquisición y el consumo de sustancias tóxicas.
- Factores de tipo familiar: Los hijos de padres fumadores, bebedores o toxicodependientes son más proclives a tomar drogas que los hijos de padres que no lo son. Un ambiente familiar demasiado permisivo, donde no exista disciplina o control sobre los hijos; o demasiado rígido, donde los hijos se encuentren sometidos a un régimen demasiado autoritario o se encuentren sobreprotegidos, puede también fomentar el consumo de drogas. La desatención de los hijos por parte de los padres, las familias divididas o destruidas, las continuas peleas de los cónyuges frente a los hijos, la falta de comunicación entre hijos y padres, todos éstos son factores que contribuyen a crear un clima de riesgo, donde la droga puede convertirse fácilmente en una válvula de escape.
Se ha comprobado que el uso de drogas por parte de los jóvenes es menos frecuente cuando las relaciones familiares son satisfactorias.
- Factores de tipo individual: Muchos factores personales pueden influir en la decisión de consumir drogas. Éstas pueden ser vistas como una vía de escape a los problemas cotidianos; algunas personas las usan como medio para compensar frustración, soledad, baja autoestima o problemas afectivos. En efecto, bajo el efecto de las drogas la persona experimenta un estado de euforia que le hace olvidar los problemas o las limitaciones que tenga. Lo malo es que es una ilusión, y luego de ese estado de euforia viene una frustración incluso mayor que la inicial, lo que lleva a la persona a recurrir nuevamente a la droga.
Otros se inician en la droga por curiosidad, o para experimentar sensaciones nuevas ante una cierta apatía, hastío, aburrimiento o incluso sinsentido de la vida. Ante el vacío que experimentan, la droga se presenta como una posibilidad, aparentemente atractiva, de llenar ese vacío.
¿Como saber si sus hijos consume drogas?
Existen algunos indicios que pueden identificarse como señales de peligro. No siempre indican la presencia de abuso de drogas, pero pueden servir como una guía para detectar dicho abuso. Entre estos indicios tenemos:
- Cambios repentinos en la personalidad y en los hábitos.- Exceso de mal humor. Irritabilidad. Susceptibilidad.- Repentina caída en el rendimiento académico o laboral.- Descuido en el aspecto y aseo personal.- Desaparición de objetos de valor o dinero en casa.- Temblores, insomnio, aspecto somnoliento o adormilado, lenguaje incoherente.- Depresión, apatía, desgano, falta de motivación.- Incapacidad de cumplir con las responsabilidades.-- Aislamiento del grupo habitual de amigos. - Hábitos antisociales, como mentir, robar o pelear.- Crisis nerviosas.- Pérdida del apetito.
- Cambios repentinos en la personalidad y en los hábitos.- Exceso de mal humor. Irritabilidad. Susceptibilidad.- Repentina caída en el rendimiento académico o laboral.- Descuido en el aspecto y aseo personal.- Desaparición de objetos de valor o dinero en casa.- Temblores, insomnio, aspecto somnoliento o adormilado, lenguaje incoherente.- Depresión, apatía, desgano, falta de motivación.- Incapacidad de cumplir con las responsabilidades.-- Aislamiento del grupo habitual de amigos. - Hábitos antisociales, como mentir, robar o pelear.- Crisis nerviosas.- Pérdida del apetito.
Los adolescentes consumen demasiado alcohol
El consumo de drogas es peligroso en la actualidad y se encuentra en un momento de crecimiento donde todas las drogas son probadas y consumidas en cantidades muy perjudiciales para la salud. Una de las primeras es el alcohol y debido a los problemas que lleva de la mano, puede ser la última.
El alcohol, una droga legal; es muy consumida por personas de todas las edades, que principalmente los fines de semanas, se hinchan a beber en parques, bares, etc.. Las primeras veces que se consume provoca borracheras increíble que pueden terminar el coma etílico. Provoca accidentes de tráfico, peleas, etc….
En los dos últimos años el número de menores de 30 que ha ingresado en Alcohólicos Anónimos ha aumentado un 50%. Normalmente la persona alcohólica es un varón de mediana edad que se encuentra desempleado y que bebe vino. Aún así son muchas las personas de avanzada edad que viven en la calle y pasan el dia bebiendo lo que pueden.Entre el 10 y el 12% de los enganchados al alcohol tienen de 25 a 30 años.
El alcohol se comienza a tomar muy jóven; cuando se hace con mucha fuerza enmascara problemas sociales; y aunque se puede dejar sin problemas puede llevar a problemas muy graves; la adicción al alcohol es muy fuerte.
El alcohol, una droga legal; es muy consumida por personas de todas las edades, que principalmente los fines de semanas, se hinchan a beber en parques, bares, etc.. Las primeras veces que se consume provoca borracheras increíble que pueden terminar el coma etílico. Provoca accidentes de tráfico, peleas, etc….
En los dos últimos años el número de menores de 30 que ha ingresado en Alcohólicos Anónimos ha aumentado un 50%. Normalmente la persona alcohólica es un varón de mediana edad que se encuentra desempleado y que bebe vino. Aún así son muchas las personas de avanzada edad que viven en la calle y pasan el dia bebiendo lo que pueden.Entre el 10 y el 12% de los enganchados al alcohol tienen de 25 a 30 años.
El alcohol se comienza a tomar muy jóven; cuando se hace con mucha fuerza enmascara problemas sociales; y aunque se puede dejar sin problemas puede llevar a problemas muy graves; la adicción al alcohol es muy fuerte.